lunes, 21 de septiembre de 2015

LA CATA DEL BARRIO DE LA ESTACIÓN

Con el comienzo de esta asignatura, mi profesor me pidió que plasmara en este diario toda mi vida cultural, y como resulta que no tengo demasiado tiempo libre, me he propuesto esforzarme y obligarme a disfrutar un poco de los actos culturales que me rodean, por lo que este fin de semana, ni corta ni perezosa me apunté a la CATA DEL BARRIO DE LA ESTACIÓN que se celebraba en mi pueblo natal, Haro.


Quedé con unas amigas para acudir a tal evento y estas a su vez quedaron con otras amigas que venían de Logroño, y que utilizaron el tren que se había habilitado para la ocasión, el cual tenía la finalidad de favorecer el trayecto de Haro a Logroño.

Fíjate cual fue el éxito de esta gran propuesta de utilizar los trenes para desplazase, que nuestras amigas intentaron cambiar el billete de tren que tenían comprado, por otro que les permitiera regresar a Logroño un poco mas tarde y les fue imposible, ya que estaban todas las plazas vendidas, en todos los horarios diferentes que había de trenes. Y teniendo en cuenta que ya casi nadie se desplaza en tren en este trayecto tan corto de Haro a Logroño, y que se habían aumentado el número de trenes que realizarían la misma ruta, resulta realmente sorprendente el éxito de este medio de locomoción, aunque he de decir que el precio del viaje fue realmente bajo, 5 euros ida y vuelta según me comentaron, por lo que ya no resulta tan extraña la buena acogida por parte de la gente.

Aquí os dejo un enlace en el que se recoge la noticia del tren del vino, que es como denominaron a esta iniciativa de utilizar un medio de desplazarse que no fuera el coche y así favorecer el consumo de alcohol, ya que como siempre insisten en las campañas de trafico: "si bebes no conduzcas"


Lo primero que debías hacer al llegar al barrio era recoger la bolsa que contenía la copa y los tiques que posteriormente canjearías por los vinos y los pinchos en las diferentes bodegas.

 

 
Para comenzar la cata de forma ordenada, mis amigas y yo nos dirigimos al punto más alejado del barrio respecto del pueblo, a la bodega RODA y una vez allí descenderíamos para ir aproximándonos al comienzo del barrio que es el punto mas cercano a la estación de trenes. Por si alguno no ha estado nunca en mi pueblo aquí tenéis el plano que entregaban junto con la copa para poder ubicar donde estaban cada una de las bodegas que formaban parte de esta cata.



En cada bodega, como venía indicado en el cuaderno de viaje que nos entregaban con la copa, tenían preparado el vino para la degustación, la tapa que habían preparado y la actividad que se podía realizar en la bodega. He de decir que dependiendo de si tenías la entrada normal o si habías comprado la entrada VIP, te servían un tipo de vino u otro y por supuesto en zonas separadas, dando a las personas con entrada VIP mayor libertad para ver las bodegas. Yo por supuesto tenía entrada normal, pero tampoco me importaba demasiado ver las bodegas ya que al ser las de mi pueblo ya las he visitado todas en mas de una ocasión, por lo que para mí la única diferencia en las entradas se encontraba en la cantidad de vinos que te podías tomar, y teniendo en cuenta que no llegue a terminar mis tiques, hice muy bien en no gastarme mas dinero en la entrada VIP.

En la primera bodega que visitamos, la bodega RODA, (que curiosamente es la última de todas estas en ubicarse en el barrio de la estación ya que construyó sus instalaciones en 1987), pudimos degustar su vino Roda Sela de la añada 2012 mientras paseábamos por su calado que termina en un balcón sobre el río Ebro.


En esta bodega no tomamos tapa, ya que nuestra entrada solamente incluía 3 tapas y 7 vinos por lo que teníamos que elegir muy bien en las bodegas que queríamos degustar las tapas, y daba la casualidad de que en ésta, se trataba de una zapatilla de jamón y queso que había elaborado el Restaurante El Jarrero, uno de nuestros bares preferidos de tapeo los sábados por la noche, así que decidimos dejar las zapatillas para cualquier otro fin de semana.

Después acudimos a visitar La Rioja Alta, fundada en 1890, donde degustamos su vino Viña Alberdi Crianza de la añada del 2008, y la tapa que ofrecían que consistía en un PIMIENTO RELLENO DE CARNE Y HONGOS DE LA RIOJA elaborado por el restaurante La Vieja Bodega de Casalarreina (muy rico, pero no llenaba demasiado).


La actividad que ofrecía esta bodega era la oportunidad de ver en vivo como se realiza la trasiega en una bodega, que explicado de forma muy basta es la forma de pasar el vino de una barrica a otra para separarlo así de las impurezas y las partículas en suspensión que quedan por gravedad en el fondo del recipiente, en este caso la barrica.
Ya sé que no es lo mismo que presenciarlo en el interior de una bodega centenaria con el olor del vino impregnándolo todo, pero para que os hagáis una pequeña idea aquí os dejo un vídeo de como sería el proceso.


Tras esta visita, cruzamos la carretera y fuimos a la bodega Lopez de Heredia Viña Tondonia, que es la bodega más antigua de Haro, y una de las tres primeras de toda La Rioja, fundada en 1877. Allí pudimos degustar su vino Viña Tondonia Tinto Reserva de la añada 2003 y apreciar la exposición de fotografía "LA HISTORIA DEL BARRIO - COLECCIÓN VIÑA TONDONIA". Que muy a mi pesar he de admitir no le prestamos la atención que seguramente se merecía, ya que con los tres vinillos que ya habíamos tomado el ambiente que llevábamos era cada vez más festivo y menos de interés cultural, aunque intentábamos ampliar nuestros conocimientos, que duda cabe...


Después del recorrido fugaz por la exposición de fotografía, nos encaminamos calle abajo hacia la bodega Gómez Cruzado, fundada en 1886 por el Duque de Moctezuma. Allí lo primero que nos encontramos al llegar es con un artista de la localidad, José Uriszar Leiva, que tiene una vinoteca en la calle de La Vega, y que se encontraba retratando la historia de la bodega en una de sus paredes, al mismo tiempo que tenía la gran paciencia de darnos conversación a todos los que por allí íbamos desfilando más o menos contentillos por culpa del vino.

   

El vino que probamos en esta bodega se trata del único vino blanco que daban a probar en esta cata, un Gómez Cruzado Blanco de la añada del 2014, que bien fresquito, como lo sirvieron, entraba estupendamente, acompañado por la tapa CREMOSO DE QUESO LOS CAMEROS CON PERA DE RINCÓN,  que me sirve para hacer referencia al estupendo queso de Los Cameros que se realiza también a mi pueblo, Haro.

Tras despedirnos de nuestro compañero artista, continuamos descendiendo por la calle hasta llegar a la bodega Muga, donde una de mis amigas de la infancia, Guiomar, nos sirvió un fantástico Muga Crianza del 2011, y pudimos degustar un BOLLITO DE MAÍZ RELLENO DE CHORIZO CALIENTE AL VINO TINTO, o lo que a mi me pareció que era, un trozo de pan con chorizo, más comúnmente llamado choripan en mi pueblo, pero que nos supo buenísimo y más teniendo en cuenta lo poco que habíamos comido por el momento y la gran cantidad de vino que habíamos bebido en comparación.


La actividad que tenía preparada esta bodega era la DOMA DE BARRICA EN LA TONELERÍA ARTESANAL, que como ya habíamos visto en visitas anterioridad a la misma bodega, decidimos saltárnosla y quedarnos charlando con la gran cantidad de gente conocida, ya que nos encontrábamos más de medio pueblo en el mismo barrio.

La última bodega a la que nos dio tiempo de acudir fue a la CVNE, comúnmente llamada "Cune" para abreviar, pero cuyo nombre completo es Compañía Vinícola del Norte de España, que fue creada en 1879 y siempre ha pertenecido a la misma familia por la que han pasado ya cinco generaciones.


La CVNE fue una de las primeras bodegas de La Rioja en embotellar, algo poco habitual ya que en aquella época se despachaba el vino en jarras, y de ahí es de donde nos viene precisamente a los de Haro el nombre de Jarreros y Jarreras.

En esta bodega nos dieron a probar su vino Cune Crianza de la añada de 2011 y como veíamos que ya no nos daría tiempo a visitar la última bodega de las 7 que intervenían en este evento de la cata del barrio de la estación, nos permitimos visitar tranquilamente la EXPOSICIÓN DE CULTURA "POZOS" de Cristina Iglesias, que era la actividad que tenía organizada esta bodega.

 

Así pues la única bodega que no tuvimos tiempo de visitar fue la de Bilbaínas, que se construyó en 1901, a pesar de que sus orígenes se remontan al año 1859 cuando se creó la bodega francesa que más tarde dio paso a Bilbaínas. Y por consiguiente nos quedamos sin probar su vino Viña Pomal Crianza del 2012.


Como conclusión he de decir que se trató de un evento muy enriquecedor a nivel cultural para todos los tipos de gente que allí nos reunimos; para los que venían en cuadrillas de amigos y para los que venían con sus hijos, ya que el despliegue de medios para el entretenimiento de unos y otros fue algo muy estudiado y cuidando hasta el último detalle, tanto en el diseño de los carteles, como de la decoración urbana, los stand colocados para las fotografías, los photocall...

Y para que veáis que no sólo lo digo yo porque es mi pueblo, aquí os pongo algunos de los enlaces a  noticias, páginas webs y bloggers que han querido recoger esta actividad cultural que es la realización de una cata en el barrio de la Estación de mi pueblo y que sin duda está dando tanto de que hablar estos días...